Uno de los cafés menos conocidos, y sin embargo uno de los más beneficiosos para la salud. El café verde sorprende tanto por su sabor como su color, además de sus conocidas propiedades naturales como adelgazante. El café verde ha llegado para ocupar un puesto en todo los hogares como el complemento perfecto para cualquier dieta.
El café verde es una variante relativamente poco conocida con respecto a los cafés tradicionales, y uno podría pensar por su nombre que es un café que ha sufrido algún tipo de alteración para conseguir un color verdoso, nada más lejos de la realidad. El café verde es el mismo grano que el de un café orgánico convencional pero sin haber pasado ningún proceso de tostado, es por eso que mantiene el color verde originario del fruto y no el marrón que adquiere el grano de café al ser tostado.
Al eliminar el tostado, conseguimos un café ecológico con un sabor completamente diferente a los cafés que estamos acostumbrados, pareciéndose más a un té terroso que a un café. Pero no solamente cambia el sabor sino que además, al no pasar por un proceso de tostado, se mantienen muchas propiedades naturales beneficiosas del grano verde.
Entre estas propiedades destaca sobretodo una alta concentración en ácido clorogénico, este ácido tiene un gran abanico de propiedades dietéticas entre las que destacan su capacidad como quemagrasas natural, reductor de la presión arterial, ayuda en el tratamiento de la diabetes tipo 2, etc. Además recientes estudios también han demostrado que el ácido clorogénico es capaz de neutralizar algunos componentes cancerígenos, protegiendo a nuestro ADN. Como puedes comprobar, son todo ventajas.
El café verde no solamente tiene un sabor diferente y único que engancha, sino que también es muy beneficiosos para nuestro cuerpo, ¡y nuestra variante además es ecológica! ¿Se puede pedir algo más?